LOS INDIGNADOS

Hola a todas y a todos los seguidores de este blog. Esta semana quiero exponer algunas ideas sobre la indignación mundial que existe, donde se pide un cambio global. El fin de semana pasado, se realizaron manifestaciones no violentas en los 5 continentes.

Este año 2011 ha sido particularmente especial, por la generación de movilizaciones globales unificadas a través de problemáticas comunes. A pesar de las distancias, culturas, idiosincracias, inevitablemente compartimos y sentimos el descarado y sucio juego de la política monetaria como eje de la esclavitud y dominación moderna. El planeta está asumiendo cargas insoportables de destrucción y saturación, gracias al espíritu posmoderno del consumo y avaricia corporativa que juega con el trabajo y los sueños de las personas; donde claramente se beneficia una minoría a costa del empobrecimiento de la mayoría.

Este movimiento comenzó en España el pasado 15 de Mayo, como un ejemplo mundial de resistencia pacífica que ha tomado resonancia en el corazón del sistema financiero de Wall Street, movimiento que se ha expandido en el mundo entero el fin de semana pasado. Hay una indignación global contra el sistema financiero y contra el sistema de valores y la relación que tenemos con el planeta y sus recursos. A través de los noticiarios hemos visto movilizaciones en ciudades como: Ginebra, París, Miami, Sarajevo, Zúrich, México, Lima, Santiago, Hong-Kong, Sidney, entre otras. Hay un descontento con el modelo capitalista que impera hoy nuestro mundo, por eso se han levantado los pueblos del mundo en alrededor de 82 países, y más de 1000 ciudades comprometidas. Esto denota que se está levantando un movimiento internacional, donde se expresa una generación sin futuro ni fe en las instituciones tradicionales, políticas y financieras; que son consideradas responsables de la crisis y que se aprovechan de los daños causados al bien común. Bien común, concepto que muchas veces queda escrito en un discurso como un principio de buenas intenciones, en medio de un mundo donde se privilegian los intereses privados, individuales, donde hay intereses creados que benefician sólo a un sector muy reducido, dejando a la deriva al resto de la población.

Desde América hasta Asia, de África a Europa; nos unimos en una protesta no violenta mundial. Los seres humanos no somos mercancías en manos de políticos y banqueros que no nos representan. Se está realizando un rechazo a los abusos del gran capital, que va dejando millones de damnificados en todo el orbe. Estamos cansad@s de políticas económicas injustas, las cuales han ido profundizando las desigualdades entre los ciudadanos; políticas económicas que sólo han traído más desempleo y recortes de gastos sociales. Las características de un mundo globalizado, van provocando que ciertos acontecimientos afectan de una u otra forma a todo el mundo, abriendo abismos entre ricos y pobres, truncando aspiraciones de miles de personas: desigualdades, inequidades, abusos, política neoliberal, valores tergiversados, egoísmo exagerado, entre otros aspectos que cada uno de ustedes puede añadir.

Este fenómeno social de los INDIGNADOS, también podemos llevarlo a lo particular, es decir, a nuestra sociedad particular y hacia nuestras familias. No es casual que en Chile el movimiento de los Indignados reunió a miles de manifestantes; se señaló que fue el país latinoamericano que reunió más personas. Esta es una señal de lo que está ocurriendo en nuestro país: con faltas de oportunidades, diálogo, intolerancia, posturas herméticas, falta de voluntad, con agresiones físicas y verbales, con represión que violenta a la multitud, no vamos a conseguir nada; al contrario, se va a ir formando un espiral de violencia que puede desencadenar acciones sociales que harán mucho daño a la ciudadanía. Escucho en los discursos hablar de democracia, pero ¿qué estamos entendiendo por ella? ¿son democráticas nuestras instituciones? ¿es democrático nuestro actuar diario? ¿se aplica la democracia en las políticas públicas de nuestro país?

Si achicamos el área, también hay indignados en nuestras familias: nuestros hij@s están cansados de que no los escuchemos, de que los dejemos abandonados afectivamente; cansados los esposos porque no se escuchan, se agreden física y verbalmente, de que no hay tiempo para SER familia porque pasamos todo el día corriendo por hacer dinero; familias disfuncionales; familias en crisis, parejas y vidas quebradas; familias desorientadas y padres sobrepasados por las demandas de sus hij@s. También hay indignados en los lugares de trabajo, en los colegios, en las empresas, en las distintas organizaciones sociales. Hay indignados por todas partes ¿qué está sucediendo? ¿qué nos está pasando? ¿qué buscamos como seres humanos? ¿por qué hemos perdido el rumbo? ¿por qué hemos dejado que las familias desaparezcan y se instalen pseudo-familias?

Hay una explosión por todas partes, y esta es una clara señal de que este estilo de vida que hemos creado no da para mas. Entonces la invitación es a tomar conciencia de aquello que nos afecta en lo particular y en lo colectivo, y a la vez generar las estrategias necesarias para revertir todo aquello que nos esclaviza, todo aquello que nos deshumaniza, todo aquello que nos desune y no nos ayuda a ser felices. El mundo está vivo y por eso está protestando, pero de esta crisis va a surgir algo bueno. Es cuestión de actitud para cambiar desde nuestro interior, donde el cambio hay que hacerlo AHORA, no mañana. Ahora es el momento para tomar la firme decisión de generar las condiciones necesarias para hacer de nuestra vida algo grato, para recuperar los valores y las directrices que nos ayudarán a vivir de verdad. Nunca es tarde para cambiar, y la VIDA misma nos demanda esparcir y derramar vida por todas partes, por todos los lugares donde estamos, especialmente volcando amor hacia nuestras familias. Desde aquí hay que construir una nueva sociedad, un nuevo mundo, una nueva forma de ver la vida, una nueva y renovada manera de HACER VIDA y promoverla. Para provocar cambios estructurales en nuestras instituciones es conditio sine qua non, primero hacer cambios en nuestras estructuras personales; que se traduzcan en sentimientos y acciones que favorezcan el crecimiento armónico y justo de cada ser humano, donde nadie quede fuera de los proyectos sociales, donde cada ser humano sea dignificado por el sólo hecho de ser persona, donde las personas recuperen su SER: en libertad, en respeto, en justicia, en diálogo, en equidad, en paz y dialogo verdadero.

Espero que a través de este posteo, se genere crítica, conversación, conciencia y cambio profundo en nuestras vidas.

Que tengan una muy buena semana y enfoquémonos en lo positivo y en los dones que cada ser humano posee. Construyamos desde lo positivo.

Un abrazo QUIQUE