LA NAVIDAD ES CELEBRAR A CRISTO

Hola a tod@s los lectores y seguidores de este blog.
Nos acercamos a celebrar Navidad y no pascua como lo señalan algunas tiendas comerciales. Navidad viene de natividad, que significa nacimiento; en cambio Pascua significa paso de la muerte a la vida, y esto lo celebramos en Semana Santa.
Para muchas personas, estas fiestas de finalización de año: término del año escolar, matrículas, paseos, pagar cuentas, Navidad, año nuevo, vacaciones de verano, el tener a los hijos en casa; se transforma en una verdadera pesadilla por todo lo económico que ello implica, ya que aún se está pagando el crédito del año pasado. La gente corre por las ofertas más tentadoras, andan con el seño fruncido, con caras largas, angustiados, enojados, se alteran por cualquier situación que los saque de su esquema diario. Especialmente a través de los medios de comunicación social, se nos invita a consumir hasta reventar las tarjetas de crédito y pedir crédito de consumo para empezar a pagar en abril o mayo, a tazas muchas veces altas. Se nos incita a adornar nuestras casas de manera muy exagerada, incluso hay concursos para aquellos que tienen sus casas más ostentosas con luces, árboles, etc.
Ya hace varios días que el comercio se prepara para recibir a tanto comprador compulsivo y extresado, porque es una maratón y nadie quiere ser menos que el otro. Por lo tanto nos endeudamos y gastamos lo que no tenemos: adornos opulentos, el viejo pascuero, los regalos cada año mas caros (porque no puede ser el mismo del año anterior, que van a decir los familiares o vecinos); creando de esta forma una atmósfera que pone su acento en el TENER: tener eso, tener aquello, comprar eso, comprar aquello. Los años pasan y nos olvidamos de lo más importante: vivir y ser feliz.
Entre tantos afanes y carreras nos olvidamos de la persona central por la cual estamos celebrando navidad: el niño Jesús. El es quien está de cumpleaños, El debería ser el centro de esta celebración; pero por lo general pasa a un segundo o tercer plano relegado a un pesebre en un rincón de la casa,porque hemos puesto al centro de esta celebración al viejo pascuero, y hemos cambiado la ciudad de Belén por los mall adornados con los árboles. ¿Qué hemos hecho? ¿En qué hemos convertido esta hermosa fiesta? ¿Por qué en muchos hogares la persona de Jesucristo ya no existe? ¿Qué nos está pasando? ¿Por qué vivimos de apariencias?
Justamente Navidad es todo lo contrario, donde lo central no son los regalos y que seamos tan ostentosos; sino que volvamos la mirada a la ciudad de Belén, donde en un humilde pesebre nace el SALVADOR de la humanidad, donde el Dios invisible se hace visible, el Dios lejano se hace cercano, donde Dios mismo viene a compartir nuestra humanidad enviando a su propio hijo. ¿Cuál es entonces el verdadero sentido de la Navidad? ¿Qué le estamos enseñando a nuestros hijos e hijas? ¿Por qué esta fiesta se convierte para muchos en una pesadilla? A veces para ser feliz, no precisamos tanto tener, lo más importante es el SER, ese ser tan olvidado: nosotros mismos, nuestra vida interior.
Nos afanamos en preparar grandes cosas externas, gastar en adornos y luces para aparentar ante los demás que estamos bien; transformándonos en ciegos de nuestra vida interior, tanto a nivel personal como familiar. De qué sirve celebrar navidad si estamos dañados interiormente, si en nuestro corazón hay: rabia, rencor, peleas, disgustos, envidia, egosísmo, etc. ESTA ES LA CASA QUE DEBEMOS LIMPIAR, aquí es donde hay que sacudir todo el polvo que se ha ido acumulando a veces por tantos años, aquí es donde hay que trabajar con decisión y buena voluntad para recibir de la mejor manera al niño que está por nacer, y que desea nacer en nuestro interior. Hoy en pleno siglo XXl, se sigue rechazando al redentor a igual que hace más de dos mil años atrás. El Señor nos invita a que nos miremos interiormente, a trabajar seriamente nuestra conversión, a fijarnos en nuestro SER, para ser una persona:

• que ama


• que es luz para los demás


• que es íntegra, decente, generosa, siempre dispuesta a ayudar

El SER lleva toda la vida conseguirlo, en cambio el tener muchas veces lo conseguimos rápido. El Ser no se acaba ni se pierde, pues el tener puede terminar inesperadamente.

Navidad, estimados amig@s es un tiempo para recorrer nuevamente nuestra vida interior y afiatarnos como familia y sociedad en torno al niño Dios, es un tiempo para detener nuestra vida alocada y darle su verdadero sentido, es un tiempo para desechar todo aquello que es lastra en nuestras vidas, para dar paso a la vedadera felicidad, es untiempo para dar y darse, para amar más a nuestros hijos e hijas, es un tiempo para DAR TESTIMONIO de que la NAVIDAD se puede vivir de manera más sencilla, centrando todo nuestros ser en la persona de Jesús, es un tiempo para convicciones y valores de verdad. Con esto no quiero señalar que los regalos sean "malos", sino que lo grave es cuando nos obcesionamos por lo material y gastamos y gastamos, cuando el niño que nace ALGO NOS QUIERE DECIR AL NACER POBRE Y HUMILDE EN UN PESEBRE, porque no había lugar para ellos en la posada. Los regalos son un signo de alegría, es compartir, pero no puede transformarse en lo central de la celebración.

Los invito a preparanos de verdad para recibir al Señor que nace en nuestras vidas y en nuestras familias, dejemos que él habite en nuestro corazón y convierta el corazón de piedra en uno de carne.

Les deseo una Feliz Navidad a tod@s , que se unan como familia, que esta navidad realmente sea diferente a todas las demás, que aprendamos a vivir Navidad con un espíritu evangélico centrado en la: alegría, sencillez, en la esperanza y en la solidaridad; porque hay muchos que por diversas razones, no tienen una familia con quien reunirse en Noche Buena.

Un abrazo. QUIQUE